Clima de sospecha

Fred Pearce en The Guardian//Traducido por Félix Nieto para Globalízate (18/06/08)

Los negadores del calentamiento global están apunto de lanzar un nuevo argumento. El mundo se está enfriando. Y están en lo cierto- bueno sólo un poco.

Globalmente, este año puede ser uno de los más fríos de los últimos tiempos- vuelta a la media de principios de los 90, según unas predicciones no publicadas. Esto no es una refutación sobre el calentamiento global ocasionado por el hombre. Es la consecuencia inevitable de uno de los ciclos climáticos de la naturaleza. La Niña, la fase fría del ciclo del Niño en el Pacifico, ha provocado que las temperaturas bajen este año.

Pero aún hay más. Los ciclos climáticos largos que se producen cada década, más o menos, también se producirán la próxima década. En particular los cambios en las corrientes del Atlántico Norte- las que han provocado que Europa se caliente más que ningún otro sitio durante la ultima década y ha ayudado a fundir el hielo del Ártico- están apunto de ir en la dirección contraria.

Un estudio Alemán publicado a principios de mes predice que el mundo se enfriará durante la próxima década. Los modelos británicos de la MET Office no van tan lejos. Piensan que el enfriamiento natural será más que contrarrestado por el calentamiento producido por nuestras emisiones de dióxido de carbono.

Pero nadie está seguro. En cualquier caso podemos esperar que los negacionistas echen agua fría sobre todo lo que se ha escrito sobre el calentamiento global. Dirán que no ha habido un año más cálido que 1998. Verdad, ese año el Niño fue muy potente. Ahora vamos cuesta abajo, dirán. Tonterías. Siguen aumentando las temperaturas y cada vez que pasa una década, los ciclos naturales pueden hacer menos para contrarrestar la creciente influencia humana sobre la temperatura.

A finales de la próxima década, el calentamiento natural volverá a combinarse con el calentamiento inducido por el hombre haciendo que la temperatura aumente mucho más. El aumento producido en los 80s y 90s se reproducirá con venganza. Ese puede ser el momento en que el cambio climático pase un punto sin retorno, cuando las capas de hielo se derritan y las selvas y los suelos comiencen a desprenderse del carbono que almacenan y lo envíen a la atmósfera acelerando el calentamiento.

Ahora, un escéptico podría decir que si los que trabajan en los modelos climáticos están empezando a comprender la importancia de los ciclos naturales para las predicciones climáticas, ¿por qué debemos creernos sus predicciones? Un punto justo. En su deseo de persuadirnos sobre el calentamiento global de una manera general, los científicos a veces se han olvidado de mostrarnos los pequeños detalles.

Hace poco asistí a una conferencia en Reading donde algunos de los principales expertos discutieron sobre sus fallos. Cómo sus aclamados modelos no pueden reproducir los Niños, o los picos altos” que traen olas de calor a Europa o incluso las edades del hielo. Como sus réplicas estadísticas sobre el clima tropical “no son serias” en palabras del documento oficial.

Esta repentina humildad no estaba desconectada con la llamada que se hizo al final de la conferencia para que el mundo se gastase mil millones de dólares en un centro para el estudio del cambio climático, como dijo uno de ellos “un proyecto estilo Manhattan para el Siglo XXI.”

Incluso así, los científicos están preocupados que muchas de sus predicciones sobre como el cambio climático va a afectar a diferentes partes del mundo son poco más que adivinanzas. Pero cualesquiera que sean las incertidumbres, el calentamiento global inducido por el hombre es real, actual y tiene una gran importancia.

Los físicos tienen conocimiento de los gases con efecto invernadero desde hace 200 años. Calcularon los efectos probables hace 100. Llevan midiendo la acumulación de los gases desde hace 60 años. El planeta ha estado calentándole mucho durante los últimos 30 años, y nadie ha salido con una explicación medianamente aceptable a parte de la más obvia. Son los gases de efecto invernadero, estúpido.

Articulo Original
Climate of suspicion
Fred Pearce en The Guardian
Saturday June 7 2008

Global warming is a fact whatever its deniers - encouraged by a cool year - have to say
Fred Pearce es el autor del libro The Last Generation
http://www.guardian.co.uk/commentisfree/2008/jun/07/climatechange