Vayamos hacia las 350 ppm o arriesguémonos a un planeta sin hielo
Traducido Félix Nieto, 12/04/2008RESOLUCIÓN SOBRE CAMBIO CLIMÁTICO
Comité Internacional IV Internacional * (12/04/08)
El Comité Internacional aprueba los puntos de orientación general elaborados en el seminario sobre el Cambio climático organizado por el IIRE del 22 al 27 de febrero del 2008.
1. Las diversas proposiciones capitalistas propuestas a debate en la perspectiva de un acuerdo climático para después del 2012 (*paquete clima * de la Comisión Europea para 2013-2020, informe Stern, proposición de la ley Warner Lieberman en USA, principalmente) son totalmente insuficientes para evitar un aumento de las temperaturas de la superficie del globo superior al nivel probable de peligrosidad (+ de 2°C en relación al periodo pre-industrial).
2. Denunciamos el cinismo y la irresponsabilidad criminal del sistema capitalista y de sus representantes políticos de todas tendencias que, a pesar de las evidencias científicas inconturnables sobre la aceleración del calentamiento climático y sobre sus consecuencias, prefieren poner en peligro la existencia humana, la salud, la alimentación, los recursos de agua y el empleo de centena de millones de seres humanos, causan a la biosfera de degradaciones irreversibles y recurrir a tecnologías peligrosas (energía nuclear), perversas (producción masiva de agrocarburantes), o insignificantes – pero a veces con consecuencias sociales importantes – (pozos de carbono) antes que poner en entredicho el crecimiento capitalista y la búsqueda del máximo beneficio.
3. Vemos la emergencia de un movimiento mundial de lucha por el clima, que se ha expresado principalmente en las manifestaciones de diciembre 2006 -2007 en Londres, en junio del 2007 en el Estado Español (“Días del sol”) y en noviembre del 2007 en Australia, así cómo, de una manera general, por las acciones de Global Climate Compaign, que son un ejemplo a seguir, en particular en el marco de los dos años de negociaciones que deben desembocar en diciembre 2009 sobre un nuevo tratado sobre el clima.
4. Es necesaria la unidad de acción, la más amplia posible, a escala mundial, a fin de obligar- por una acción de masas- a los gobiernos a actuar como mínimo en conformidad a las tres recomendaciones del GIEC (1. las emisiones de gas de efecto invernadero de los países industrializados deben disminuir del 25 al 40% de aquí al 2020; 2. les emisiones globales deben culminar su aumentación en los próximos 10 o 15 años; 3 las emisiones globales deben disminuir del 50 al 85% de aquí al 2050), en el respeto de los derechos sociales y democráticos, así como, el derecho de todas y todos a tener una existencia humana digna de este nombre.
5. En virtud del principio de precaución, y teniendo en cuenta los márgenes de incertidud de las proyecciones obtenidas con la ayuda de los modelos científicos sobre el clima, es imperativo que se inserte los objetivos de reducción sobre la parte superior de los márgenes de las recomendaciones del GIEC, a fin de limitar al máximo los desastres, desgraciadamente inevitables, debido a que el calentamiento global es ya una realidad.
6. Hoy existen numerosos movimientos sociales que contribuyen a sentar las bases de una alternativa al productivismo capitalista (en luchando principalmente contra la explotación petrolera y de gas, por la salvaguarda de los bosques tropicales, por los derechos de las comunidades autóctonas, por una agricultura orgánica campesina, por otra política sobre los residuos privilegiando el reciclaje, contra la expansión sin freno del transporte por carretera, marítimo y aéreo, por transportes públicos gratuitos y de calidad, por la moderación energética, contra la industria nuclear y de armamento, contra la flexibilidad y la precarización del trabajo, por una utilización racional del agua, contra la publicidad y el consumismo, por una distribución no mercantil de las tecnologías y los conocimientos ), y les incitamos a inscribirse explícitamente en la lucha mundial por salvar el clima.
7. La lucha a favor del clima no puede ser ganada sin la participación activa de l@s explotad@s y de l@s oprimid@s que constituyen la inmensa mayoría de la población, y sin integrar sus reivindicaciones y aspiraciones sociales legítimas, principalmente en materia de empleo y de protección social y abogamos en consecuencia para que una atención particular sea dada a la participación de organizaciones obreras y campesinas, del movimiento de mujeres, de las comunidades indígenas, de las organizaciones populares en defensa del medio ambiente, así como de la juventud y de l@s exlcuid@s, para que sus reivindicaciones se tengan en cuenta a la hora de fijar los objetivos y las formas de acción.
8. Rechazamos las recetas capitalistas (mercado de los derechos a contaminar, tasa sobre el carbono, inversiones ‘limpias” generatrices de créditos de carbono, ayudas a las empresas, subordinación de la investigación a los intereses capitalistas, desmantelamiento de la protección social y regulaciones de todo tipo…. ) que, tanto en el dominio de la lucha contra el cambio climático como en la lucha contra la adaptación a sus efectos, implican inevitablemente el reforzamiento de la dominación imperialista, de la concurrencia y de la violencia capitalista; en resumen de la explotación, de la opresión, de la competitividad entre l@s trabajadoras/es, de la violación de los derechos sociales y del control de las clases dominantes sobre todo los aspectos de la vida.
9. La energía nuclear, por numerosas razones ( en concreto la ausencia de soluciones para los desperdicios nucleares, sus lazos con la industria militar y los riesgos de proliferación nuclear, la débil eficiencia energética, un balance mediocre sobre el carbono en el conjunto de la filiera, la centralización extrema contraria a la descentralización y a la recuperación del calor) no constituye una alternativa al cambio climático y denunciamos las presiones de los lobby a favor del desarrollo de estas industrias.
10. El cambio climático plantea un nueva amenaza de aumentación de guerras interimperialistas e intercapitalistas por el control de los recursos naturales, principalmente de los recursos energéticos fósiles, así como por la defensa de la renta petrolera y otros privilegios.
11. Denunciamos la aumentación de la ideología neo-malthusian en ciertos medios burgueses de una gestión capitalista bárbara y guerrera de la crisis climática, en perjuicio de los pueblos más pobres, de los pobres en general, del mundo del trabajo , de las victimas de las catástrofes naturales, de los candidat@s a la emigración y de las mujeres en particular.
12. Rechazamos categóricamente cualquier intento de achacar el cambio climático al crecimiento demográfico, en particular el de los países en vías de desarrollo, recuerda los lazos incontestables entre desarrollo y transición demográfica y reafirmamos con fuerza el derechos de las mujeres a decidir ellas de tener hij@os o no, derecho que implica que las mujeres tengan libremente acceso a las técnicas de control de natalidad así como el derecho al aborto.
13. Los países desarrollados deben responder positivamente a la oferta generosa y responsable del presidente ecuatoriano Rafael Correa, quien para proteger la biodiversidad y estabilizar la concentración de gas carbónico en la atmósfera, proponer de no explotar un importante yacimiento de petróleo situado en la selva tropical, a cambio de una parcial compensación por la perdida de los beneficios que su país podría ganar. En este contexto, señalamos que los países industrializados del Norte deben asumir su responsabilidad histórica por las catastrofes que sufren los países del Sur à causa del cambio climático.
14. Frente a la lógica capitalista, agravada por las políticas neoliberales, nosotros defendemos la necesidad de un plan mundial que combine una revolución energética (utilización moderada de los recursos naturales, aumentar la eficacidad energética, abandono de las fuentes de energías fósiles y sustitución por energías renovables – geotérmicas y solares en sus diversas formas – descentralización , cambio radical del sistema de transportes de bienes y de personas,…) y la realización de medidas de adaptación y de reconversión indispensables, independientemente de los posibles costos y beneficios, en la perspectiva de un derecho igual de todos los humanos a consumir y a emitir de carbono, en los limites ecológicos y físicos de la biosfera.
15. Para la realización de tales proyectos se necesita romper con la lógica del crecimiento económico, de la mundialización y de la consumación capitalista (supresión de ramas de actividades económicas inútiles o dañosas como la industria armamentista o del sector publicitario, desmantelamiento de los complejos industriales basados sobre el uso de combustibles fósiles con la reconversión de l@s empleado@s y con una reducción radical del tiempo de trabajo, relocalización parcial de la producción y de la consumación agrícola), la revalorización del sector público, la propiedad colectiva de los recursos energéticos, una amplia redistribución de las riquezas entre los países y entre las clases ( anulación de la deuda de los países del Sur, una fuerte tasación sobre los beneficios del sector energético, tasar los patrimonios…) así como una participación de masas con practicas democráticas de control.
16. La izquierda en su conjunto, incluida la Cuarta Internacional, está gravemente en retraso sobre el tema del cambio climático y en consecuencia de esto : nos comprometemos a seguir regularmente este tema a través de Inprecor y IVP; urgimos a las secciones a integrar este tema en nuestra propaganda y en nuestra actividad, de participar a las movilizaciones mundiales sobre el clima, de contribuir allí donde podamos a la construcción de una movilización mundial sobre el clima, así como de intentar converger los movimientos sociales hacía estas movilizaciones , y damos nuestro acuerdo para organizar un nuevo seminario sobre el cambio climático en 2010.
17. La crisis energética/climática expresa aún más si cabe la necesidad de una redefinición aún más profunda del proyecto socialista, en el sentido de un proyecto global de tipo ecosocialista (integrando a la vez las necesidades reales humanas, democráticamente determinadas y la gestión responsable de la biosfera). La constitución de la red ecosocialista internacional es un paso importante en esta dirección.
18. El próximo congreso mundial de la Internacional examinará un proyecto de resolución sobre la lucha contra el cambio climático, las alternativas programáticas y sus implicaciones para el proyecto socialista que proponemos.
* Fuente puntodevistainternacional.org
Noticia original:
http://www.espacioalternativo.org/node/2747