Rato alecciona a España desde el FMI para que mantenga su disciplina fiscal
Pedro Rodríguez, 17/04/2005, ABCWASHINGTON. Rodrigo Rato, en su nuevo papel de recriminador de excesos financieros y rompiendo con una pauta inicial de prudencia con respecto a cuestiones de nuestro país, instó ayer a que España mantenga su disciplina fiscal, logrando «superávit claros» durante los próximos años. En vísperas de la asamblea de primavera del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial en Washington, Rato ha aprovechado la rueda de prensa de presentación para realizar una serie de recomendaciones presupuestarias al nuevo Gobierno socialista.
Según la respuesta del director gerente del FMI a una pregunta periodística, España en los próximos años debe «aumentar sus logros previos» en materia fiscal, incorporando a las Comunidades autónomas al proceso de ahorro nacional. Rato también ha insistido en que la economía española debe «equilibrar» su patrón de crecimiento con aplicación de medidas liberalizadoras que aumenten la competencia. Con un especial esfuerzo en activar sectores «protegidos» con la ayuda de compañías extranjeras, en la flexibilización del mercado de trabajo y aumento de la productividad.
Ante las previsiones de inflación españolas, la mayor de la zona euro, Rato ha aconsejado a sus sucesores gubernamentales en Madrid que adopten una política «creíble» contra el aumento de precios. A su juicio, las condiciones monetarias españolas en estos momentos son «muy expansivas», alimentadas por tipos de interés muy bajos. Según las previsiones publicadas por el FMI, España sufrirá este año una subida de precios al consumo del 3,1%, con un rebaja prevista para 2006 del 2,7%.
Panorama benigno
Más allá de España, el responsable del FMI ha descrito el panorama económico mundial como «benigno», pero con aumento de riesgos asociados con los altos precios del petróleo y los desequilibrios en la balanza por cuenta corriente. Dentro de sus pronunciamientos sobre la economía global, Rato ha reprochado que «el crecimiento potencial de la zona euro es bajo, ciertamente menor que el 2%».
Esta cumbre de primavera será la última para el saliente presidente del Banco Mundial, James Wolfensohn, que el primero de junio será sustituido por el hasta ahora «número dos» del Pentágono, Paul Wolfowitz. El banquero de origen australiano, que hubiera querido continuar durante un tercer mandato de cinco años en su puesto, ha sido designado como coordinador de los esfuerzos de reconstrucción de Gaza y reformas en los territorios palestinos en representación del llamado cuarteto -Estados Unidos, Rusia, UE y la ONU- que auspicia el proceso de paz en Oriente Medio.