Lamy presenta la hoja de ruta para las negociaciones del otoño
Organización Mundial del Comercio, 02/08/2009ORGANIZACIÓN MUNDIAL DEL COMERCIO (OMC)
COMITÉ DE NEGOCIACIONES COMERCIALES
El Director General Pascal Lamy, en el informe que presentó en la reunión informal del Comité de Negociaciones Comerciales celebrada el 24 de julio de 2009, dijo que tras las cumbres que han tenido lugar recientemente en Bali, París, L’Aquila y Singapur notaba “una genuina y firme renovación de los compromisos políticos de reanudar las negociaciones de Doha para concluirlas en 2010”. Señaló que el otoño será “un período de gran actividad” para todos los grupos de negociación, y que “tenemos que asegurarnos de que toda la caravana avance unida y llegue a tiempo”.
Declaración de Pascal Lamy
Les doy a todos la bienvenida a esta reunión informal del CNC.
He pensado que sería útil examinar, antes de la reunión del Consejo General de la próxima semana, hasta dónde hemos llegado en las negociaciones del Programa de Doha para el Desarrollo, y considerar el camino que nos queda por recorrer. Permítanme, antes de que procedamos a intercambiar opiniones sobre el trabajo y las próximas etapas del proceso del PDD en los siguientes meses, que los informe sobre mis actividades y reuniones más recientes.
Desde que les rendí informe en el Consejo de mayo, la economía mundial ha seguido dando muestras de fragilidad, y las perspectivas económicas son aún inciertas. Aunque recientemente los mercados financieros han dado indicios de estabilización, y la contracción del comercio —que ahora se prevé en un 10 por ciento en volumen— parece estar tocando fondo, todavía no está claro en qué modo ello nos llevará a superar la crisis, ni cuánto tiempo tardará en hacerlo. Aunque Asia está empezando a experimentar un incremento del comercio con respecto a las muy bajas cifras del primer trimestre del año, sigo siendo muy cauteloso. El desempleo sigue aumentando, y sus efectos sociales y políticos aún no se han manifestado plenamente.
Sobre este incierto telón de fondo, es alentador observar que muchos líderes mundiales han puesto muy claramente de manifiesto su decisión de proseguir con las negociaciones de Doha y llevarlas muy pronto a su conclusión. Aquí en Ginebra, los negociadores han escuchado la llamada de sus líderes y han reanudado sus trabajos con razonable rapidez y seriedad. El compromiso colectivo asumido por los Ministros con la Ronda sigue siendo muy firme, lo que no debe sorprendernos. La amplitud, profundidad y repercusión mundial de esta crisis no tienen precedentes, y ellos consideran que debemos actuar colectivamente para enviar las señales adecuadas y establecer un entorno comercial que permita a todos una recuperación sostenible.
Con posterioridad a la reunión de mayo del Consejo General los he informado sobre varias reuniones a las que he asistido, así como sobre una serie de contactos mantenidos con Ministros y otros encargados de la formulación de políticas. También había previsto asistir a una intensa serie de reuniones, que acaba de concluir con la muy fructífera reunión de reflexión de los Ministros de Comercio del APEC en Singapur.
En las reuniones de Ministros y Jefes de Estado y de Gobierno celebradas en Bali, París, L'Aquila y Singapur he hecho hincapié en tres mensajes fundamentales: i) tenemos que mantener el comercio abierto y oponer resistencia a las medidas proteccionistas; ii) la mejor manera de mantener el comercio abierto es seguir abriéndolo, y de ahí la necesidad de concluir la Ronda de Doha lo antes posible. Habida cuenta de ello, invité a los líderes a dar a sus negociadores y altos funcionarios la flexibilidad y las instrucciones necesarias para acortar las diferencias que aún persisten y acelerar la adopción de decisiones en Ginebra, y iii) tenemos que hacer efectivos los compromisos básicos de Ayuda para el Comercio y seguir proporcionando el lubricante que requiere la maquinaria del comercio internacional, que no es otra cosa que la financiación del comercio.
Todas esas interacciones, como revelan los comunicados emitidos después de esas reuniones, han dado lugar a firmes declaraciones de rechazo de las medidas proteccionistas. He notado una genuina y firme renovación de los compromisos políticos de reanudar las negociaciones de Doha para concluirlas en 2010. Se ha puesto de relieve la necesidad de colmar las lagunas que aún persisten, así como el deseo de aumentar la transparencia y la comprensión de lo que tenemos sobre la mesa. Muy alentadora fue la voluntad de evitar discusiones teológicas y en lugar de ello sumarse al objetivo común de encontrar una forma práctica de avanzar. En suma, ahora el clima ha cambiado y disponemos de un punto de llegada.
Continuaré manteniendo esos contactos para que la atención se siga centrando en la necesidad de impulsar la Ronda en la próxima reunión de Ministros de Comercio que organizará la India y en la Cumbre de dirigentes del G 20 de Pittsburgh que tendrá lugar en septiembre.
Es evidente que a juicio de los dirigentes políticos estamos entrando en la etapa final del proceso. Por consiguiente, es necesario que aprovechemos sin tardanza este nuevo clima para avanzar con decisión en todas las esferas de las negociaciones en Ginebra, de manera que podamos llegar puntualmente a la meta. La impresión que he sacado de mis recientes conversaciones con varios de ustedes es que es importante que a finales de julio tengamos una idea clara de cuáles serán los próximos pasos.
Es necesario que reactivemos y determinemos con precisión las dos vías que examinamos en nuestra última reunión del CNC, empezando por el trabajo multilateral en todos los grupos de negociación. Este ha sido y será el núcleo de nuestras negociaciones.
También es necesario reactivar las conversaciones bilaterales, en las que participan algunos de ustedes, y que profundicen ustedes en aspectos específicos. Es necesario que ahora veamos un empeño serio y sincero. Sin embargo, la labor a nivel bilateral no debe ser un motivo para frenar o interrumpir el proceso multilateral. Ambos procesos han de avanzar simultáneamente. También debe quedar claro, por supuesto, que las decisiones sólo han de tomarse a nivel multilateral. Para reforzar esta idea, es importante que en esas conversaciones bilaterales haya la máxima transparencia posible.
Mis contactos indican también que, en opinión general, la consignación en listas en las esferas de la agricultura y el AMNA debe regirse por el principio de que no haya sorpresas. Esto quiere decir que todas las cuestiones significativas relacionadas con las listas deberán estar claras en el momento en que se establezcan las modalidades. Con arreglo al concepto del todo único, también será necesario que haya un nivel proporcionado de certidumbre en los demás grupos de negociación, lo que implica que las delegaciones deberán empezar a pensar en enviar señales a los presidentes de todos esos grupos sobre qué cuestiones consideran “de elevado interés” para ellas. Tendrá que haber también un acuerdo general sobre la necesidad de no tomar “rehenes”. Por último, a partir de septiembre habrá que entablar más procesos horizontales para tener en cuenta las sensibilidades políticas en todos los frentes.
En este contexto, deseo ahora referirme a cada una de las esferas de negociación a fin de informarles brevemente sobre la situación actual y darles una idea del tipo de hoja de ruta que los presidentes de los grupos de negociación han previsto para las semanas siguientes a la pausa estival.
Como ustedes saben, se continúa trabajando en la esfera de la agricultura, especialmente a la luz del renovado mandato político impartido por el G 20 y el G 8. Se han identificado las cuestiones anotadas y entre corchetes de la versión 4 revisada en las que es necesario seguir trabajando. Entre ellas se incluyen el MSE (especialmente su estructura), el algodón, las cuestiones relativas a los productos sensibles, la erosión de las preferencias y los productos tropicales, la ampliación de los contingentes arancelarios y la simplificación arancelaria. El Presidente ha indicado que se han iniciado consultas para determinar el mejor modo de abordar estas cuestiones, con miras a establecer un programa continuado de trabajo técnico desde finales del verano hasta el otoño. La finalidad es concluir en la mayor medida posible el trabajo técnico pendiente, a fin de sentar las bases para la adopción de decisiones sobre cuestiones de carácter más político.
Están en curso debates sobre los modelos de listas y el modo de presentación de los cuadros explicativos y las necesidades de datos, tanto para completar los modelos como para establecer las modalidades y los calendarios y definir el proceso de consignación en listas y verificación. Será importante que los Miembros hagan suya esta cuestión, de manera que estén en condiciones de concluir, con arreglo a los plazos y modelos convenidos, el proceso de consignación en listas en la esfera de la agricultura una vez se hayan establecido las modalidades. Se trata de un trabajo no político muy necesario, que deberá proseguir de manera más selectiva a partir de septiembre.
En lo que respecta al AMNA, aparte de una serie de reuniones de transparencia, de participación abierta, que tuvieron lugar en el primer semestre de este año, el Grupo de Negociación también ha celebrado dos sesiones específicas sobre los obstáculos no arancelarios. Estas sesiones ayudaron a las delegaciones a centrarse en los textos jurídicos. El Grupo también ha estado examinando las cuestiones relativas a la consignación en listas, y la semana del 13 de julio se celebró un Taller sobre los ficheros electrónicos de negociación. Me han llegado reacciones muy positivas acerca de este Taller.
El proceso de las iniciativas sectoriales sigue siendo impulsado por los patrocinadores de esas iniciativas. Durante el primer semestre de este año, los patrocinadores han estado realizando una labor técnica detallada para analizar con sus interlocutores comerciales, sobre una base fáctica, cifras, simulaciones sector por sector y análisis país por país. Sé que el Presidente se ha reunido por separado con algunos de estos grupos, que parecen estar a punto de finalizar la labor técnica e iniciar sus actividades de colaboración con sus interlocutores comerciales.
También se han celebrado consultas sobre las flexibilidades específicas de cada caso, para ver si ha habido novedades al respecto. Creo que por el momento no puedo comunicarles ningún avance concreto.
En cuanto al programa de trabajo para los próximos meses, el Presidente ha previsto tres semanas dedicadas al AMNA a partir de septiembre, en las que se hará especial hincapié en hacer avanzar las negociaciones sobre los obstáculos no arancelarios. Queda mucho por hacer en esta esfera. Respecto de las demás cuestiones por resolver, el Presidente tiene la intención de ocuparse de ellas cuando los Miembros estén dispuestos a abordarlas.
En relación con los Talleres sobre la consignación en listas, tanto en el ámbito de la Agricultura como en el del AMNA, soy muy consciente de que algunos de ustedes han planteado la necesidad de que se preste asistencia técnica a los funcionarios de sus capitales a fin de que estén bien preparados para la consignación en listas cuando llegue el momento. Hemos tenido en cuenta esta necesidad al planificar nuestras actividades de asistencia técnica para los próximos meses. Como siempre, esta planificación se ha hecho en colaboración con todas las delegaciones interesadas, a las que se invita a ponerse en contacto con la Secretaría con respecto a las necesidades específicas que puedan surgir.
En cuanto a los servicios, en los últimos meses la actividad del Consejo del Comercio de Servicios en Sesión Extraordinaria se ha centrado principalmente en una labor técnica, que se ha desarrollado tanto en forma de debates bilaterales y plurilaterales como de reuniones de grupos de amigos, celebradas al margen de las reuniones habituales sobre servicios. Los debates técnicos se han centrado en conocer mejor las peticiones y las posibles ofertas y en definir con mayor precisión los resultados de la Conferencia Ministerial de manifestación de intenciones celebrada el pasado mes de julio. Los órganos subsidiarios también se han reunido, y se han organizado un seminario sobre servicios financieros y un Taller sobre la consignación en listas.
La aplicación de las Modalidades relativas a los PMA ha sido siempre un tema importante en las negociaciones sobre servicios, y prosiguen las consultas acerca de una comunicación relativa a un mecanismo de exención para los PMA, cuya presentación está prevista.
De cara al futuro, los Miembros convienen en que, en el contexto del PDD, la labor sobre los servicios debe proseguir sobre la base del informe elaborado en julio por el Presidente del Consejo del Comercio de Servicios en Sesión Extraordinaria, así como del Anexo C de la Declaración Ministerial de Hong Kong. Además, deberían acelerarse los trabajos en esta esfera, en lo que respecta tanto al acceso a los mercados como a las normas del AGCS. La próxima serie de reuniones sobre servicios se celebrará la semana del 5 de octubre.
En la esfera de las normas, el Presidente distribuyó en diciembre de 2008 nuevos textos sobre medidas antidumping y subvenciones horizontales. El Grupo de Negociación se ha reunido periódicamente para debatir estos textos, concretamente en febrero, marzo, mayo y junio/julio. Las delegaciones tratan las cuestiones de manera sistemática: examinan tanto los aspectos que están entre corchetes en los textos como los que no lo están, y vuelven a examinar cuestiones que todavía no se han abordado en los textos del Presidente. Además, los Miembros han iniciado un proceso, sobre la base de los documentos preparados por la Secretaría a petición del Presidente, para considerar si sería útil armonizar las diferencias entre las disposiciones antidumping y sobre medidas compensatorias de los dos Acuerdos. El Presidente espera proseguir esta labor en otoño, con una reunión programada a mediados de septiembre y otra prevista para octubre.
Con respecto a las subvenciones a la pesca, las delegaciones continúan sus trabajos sobre la hoja de ruta distribuida al mismo tiempo que los textos de diciembre de 2008. El Presidente ha indicado que espera finalizar el examen de la hoja de ruta en otoño; ya se ha programado la próxima reunión para septiembre, y está prevista otra reunión en octubre. Una vez finalizado el examen de la hoja de ruta, la intención del Presidente es dar a las delegaciones la oportunidad de presentar otras visiones posibles de la estructura y el contenido de las disciplinas relativas a las subvenciones a la pesca.
Ustedes recordarán que el Presidente, cuando distribuyó su texto de 2008, subrayó que adoptaba con respecto a las negociaciones el enfoque de acumulación progresiva que habían solicitado las delegaciones. El Presidente espera que los debates intensivos que tienen lugar actualmente le pongan en condiciones de poder distribuir nuevos textos, que es de esperar reflejen un cierto grado de convergencia, cosa que sólo puede provenir de los Miembros.
En cuanto a los acuerdos comerciales regionales, es preciso debatir dos cuestiones: una es el examen del Mecanismo de Transparencia con vistas a hacerlo permanente, y la segunda son las cuestiones sistémicas. Con respecto a la primera, los Miembros estiman que todavía están acumulando experiencia en la aplicación del Mecanismo, y por ello prefieren esperar antes de acometer el examen. Con respecto a las cuestiones sistémicas, los debates dependen de que los Miembros presenten propuestas basadas en textos. Sin embargo, aunque se han sugerido algunas ideas sobre esta cuestión en el contexto de los preparativos de la Conferencia Ministerial, todavía no se ha presentado ninguna propuesta basada en textos concreta. Tengo entendido que el Presidente prevé convocar una reunión informal del Grupo para determinar la forma de hacer que este proceso avance.
Por lo que respecta al Consejo de los ADPIC en Sesión Extraordinaria (los trabajos sobre el registro de indicaciones geográficas de vinos y bebidas espirituosas), la intensificación de la labor técnica desde noviembre de 2008 ha dado lugar a aclaraciones útiles de las propuestas escritas que hay sobre la mesa, incluso en lo referente a cómo se aplicarían a nivel nacional las propuestas de registro de las indicaciones geográficas de vinos y bebidas espirituosas de los diversos proponentes. También se ha realizado un trabajo considerable sobre determinadas cuestiones, como las referentes a los elementos de notificación y registro. Sin embargo, el logro de nuevos progresos puede depender de la resolución de dos temas fundamentales que todavía dividen a los Miembros: en primer lugar, las consecuencias jurídicas y de procedimiento que tendría el registro de una indicación geográfica de vinos y bebidas espirituosas en la legislación y la administración nacionales; y, en segundo lugar, el carácter voluntario u obligatorio de la participación de los Miembros en el registro. También habrá que mantener nuevas negociaciones sobre otras cuestiones, como los costos y cargas y el trato especial y diferenciado.
El Presidente del Consejo en Sesión Extraordinaria ha instado a que se celebre un debate estructurado y sustantivo sobre las cuestiones pendientes. Con este fin, a partir de septiembre intensificará las consultas con los Miembros y los debates sobre las cuestiones de fondo. También ha pedido un documento nuevo o revisado de los Miembros y, de no producirse este documento, no excluiría la posibilidad de elaborar un texto del Presidente que identifique las cuestiones pendientes y las opciones para solucionarlas.
Por cuanto se refiere al CCMA en Sesión Extraordinaria, en marzo y julio se celebraron reuniones de transparencia, informales y abiertas, y durante ese período el Presidente celebró consultas sobre el camino a seguir. Aunque durante el primer semestre del año tal vez no haya habido la “tracción” necesaria para llevar adelante los trabajos (dados los evidentes vínculos con la labor de otros grupos de negociación), ahora parece que hay voluntad de proseguir sobre la base del programa de trabajo de julio de 2008.
El Comité celebrará otra reunión en septiembre y, coincidiendo con ella, se impartirá un Taller sobre bienes y servicios ambientales. Ese Taller dará la posibilidad de seguir analizando y debatiendo los sectores de los bienes y las tecnologías ambientales, además de abordar los aspectos del mandato relacionados con el desarrollo.
La hoja de ruta para después de septiembre figura en el programa de trabajo de julio de 2008. En relación con los apartados i) y ii) del párrafo 31, aparte de determinadas cuestiones sobre las que habrá que seguir celebrando consultas, el próximo paso será la negociación basada en textos. En cuanto al apartado iii) del párrafo 31, se invitará a los Miembros a que presenten comunicaciones en las que se identifiquen bienes ambientales de interés, incluidos bienes que puedan ser objeto del proceso de peticiones y ofertas —así como propuestas concretas sobre cómo podría el Comité abordar cuestiones transversales o relacionadas con el desarrollo en el marco del mandato—.
En lo que afecta al trato especial y diferenciado, este año los trabajos se han centrado sobre todo en los elementos de un Mecanismo de Vigilancia. Esta labor, realizada en su mayor parte en pequeños grupos, se basó inicialmente en las comunicaciones presentadas por unos cuantos países Miembros desarrollados y en desarrollo. Más tarde, basándose en esas comunicaciones y en los debates mantenidos, el Presidente presentó un documento no oficial en el que destacaba las posibles esferas de convergencia. En ese documento no oficial se tratan de identificar los elementos sobre los que hay un mayor grado de convergencia y aquéllos sobre los que hay que seguir trabajando.
En cuanto a las seis propuestas relativas a acuerdos específicos sobre las que han venido trabajando los Miembros, el Presidente indicó que las posiciones no estaban muy alejadas. Sin embargo, había tenido que suspender el examen de esas propuestas porque al parecer no había la flexibilidad necesaria para conducir el proceso hacia una mayor convergencia.
En cuanto a las propuestas de la categoría II relativas a acuerdos específicos, la Secretaría ha procurado identificar las propuestas que se están estudiando, ya sea parcialmente o en su totalidad, en el marco de las actividades en curso de los distintos órganos de la OMC, incluidos los órganos de negociación. La próxima fase consistirá en examinar, en colaboración con los Presidentes que corresponda, la mejor manera de acelerar los progresos sobre estas propuestas, en particular las que no se están abordando en el marco de las actividades en curso.
Sobre la forma de avanzar, el Presidente ha indicado que tiene intención de seguir perfeccionando los elementos del Mecanismo de Vigilancia sobre la base de su documento no oficial. Esta labor proseguirá en consultas con grupos pequeños, aunque con las habituales reuniones abiertas de transparencia para mantener informados a todos los Miembros de cualquier novedad.
Por lo que respecta a las propuestas relativas a acuerdos específicos, el Presidente me ha comunicado que tal vez intente salvar las diferencias que subsisten en torno a las seis propuestas, que los Miembros habían abordado antes. Creo que las diferencias son pocas y que no estamos muy lejos de la convergencia, lo cual nos permitiría añadir estas 6 propuestas a nuestra lista de 28 propuestas acordadas en principio.
Las negociaciones sobre la facilitación del comercio han avanzado hasta una fase en la que los parámetros del Acuerdo previsto están empezando a tomar una forma clara. Después de varias rondas de examen de los textos propuestos, los Miembros han alcanzado un punto en el que ya tienen una buena idea de las medidas que va a contener. También se han hecho progresos en el aspecto del trato especial y diferenciado, en el que están comenzando a perfilarse elementos del mecanismo de aplicación fijado como objetivo.
Tras haber concluido recientemente una ronda de revisión de sus textos de negociación, los Miembros han acordado llevar el proceso de perfeccionamiento y refundición al nivel siguiente, pasando a una etapa de redacción con objetivos concretos. Este mes se ha realizado una primera prueba del nuevo método de trabajo, que se desarrollará más ampliamente durante el otoño. Con ese fin se han programado dos reuniones a partir de principios de octubre.
La labor concerniente al pilar de la aplicación también tendrá que avanzar. Los progresos se plasmarán en un documento de resumen elaborado por el Amigo del Presidente. Se combinarán los tres documentos existentes para reunir los distintos elementos de manera secuencial, lo que permitirá a los Miembros basar sus negociaciones en un conjunto global de ideas.
Hablaré ahora de la solución de diferencias, aun cuando no forma parte del todo único. Los trabajos realizados en las reuniones en Sesión Extraordinaria desde comienzos de año se han centrado en el examen del proyecto de texto jurídico que figura en el documento del Presidente del pasado mes de julio, que los Miembros aceptaron como base para la labor futura a finales del año pasado.
Durante las últimas consultas, el Presidente anunció que esperaba celebrar otras tres tandas de consultas antes de que acabara el año. El objetivo del Presidente es estar en condiciones de presentar un proyecto de texto jurídico revisado lo antes posible.
Paso a referirme brevemente a las cuestiones relacionadas con la extensión de las indicaciones geográficas y la relación entre el Acuerdo sobre los ADPIC y el CDB. He proseguido las consultas con arreglo al mandato que se me encomendó en el párrafo 39 de la Declaración Ministerial de Hong Kong de intensificar este proceso y rendirles informe a ustedes con carácter regular. He celebrado estas consultas personalmente desde marzo de 2009; hasta la fecha se han convocado cuatro reuniones con un grupo de delegaciones, y la atención se ha centrado en aspectos técnicos de estas cuestiones. Presentaré a todos los Miembros un informe detallado sobre este proceso en una consulta de participación abierta que tendrá lugar el próximo lunes 27 de julio. Posteriormente informaré al Consejo General el martes 28 de julio.
Quiero hacer una observación rápida sobre la Ayuda para el Comercio. Creo que el haber organizado el segundo Examen Global de la Ayuda para el Comercio aquí en Ginebra hace un par de semanas ha sido importante tanto para evaluar los resultados de esta iniciativa en términos globales como para obtener compromisos adicionales y sustanciales de los donantes. La presencia de Ministros, del Secretario General de las Naciones Unidas y de los directivos de instituciones internacionales y regionales, incluidas instituciones financieras, ha enviado una señal clara sobre la importancia de la cooperación internacional frente a la recesión económica actual. Por supuesto, la Ayuda para el Comercio no forma parte de las negociaciones en curso en el marco del PDD, pero estoy firmemente convencido de que el objetivo de mejorar las perspectivas de crecimiento ayudando a los países a superar sus limitaciones con respecto a la oferta y a aumentar su competitividad y su participación efectiva en el comercio mundial otorga a la Ayuda para el Comercio un lugar central en nuestro programa sobre comercio y desarrollo.
Con eso concluye mi informe. Siento haberme extendido tanto, pero en esta fase de nuestros trabajos me parece importante ofrecer una imagen completa y clara del camino que queda por delante.
Hemos hecho un largo recorrido, y no estamos lejos del final de nuestro viaje. Sabemos, no obstante, que el último tramo será intenso y difícil.
De la hoja de ruta que acabo de describir se desprende que el otoño será un período de gran actividad. Tenemos que asegurarnos de que toda la caravana avance unida y llegue a tiempo. Confío en que podremos hacerlo, si nos mantenemos firmes en nuestros compromisos y esto lo acompañamos de hechos. Espero que todos ustedes aprovechen al máximo las vacaciones, para que volvamos con energías renovadas y preparados para un otoño ajetreado y productivo.
Noticia original:
http://www.wto.org/spanish/news_s/news09_s/tnc_dg_stat_24jul09_s.htm