La Administración Bush manipuló los estudios sobre cambio climático
El Mundo, 13/06/2005Pablo Pardo/El Mundo
El martes pasado, en una rueda de prensa con el primer ministro británico, Tony Blair, George W. Bush dijo, respecto al calentamiento de la atmósfera, que EEUU «lidera el mundo cuando se trata de dólares gastados, millones de dólares, en investigar el cambio climático». Sin embargo, el uso de los 1.800 millones de dólares presupuestados por EEUU para analizar el efecto invernadero es cuestionable. Porque, aunque Bush no lo dijo, la Casa Blanca censura sistemáticamente esos estudios.
Según el diario The New York Times, el director del Consejo de Calidad Medioambiental de la Casa Blanca, Philip A. Cooney, ha llevado a cabo docenas de cambios en informes realizados por el Programa del Cambio Climático, el organismo oficial de Estados Unidos que analiza este fenómeno. Utilizando un rotulador, Cooney puso, por ejemplo, las palabras «significativas y fundamentales» antes del término «incertidumbres», en un texto que explicaba las dificultades para predecir la evolución del clima.
Básicamente, el trabajo de Cooney consiste en torpedear iniciativas destinadas a investigar el cambio climático. En ocasiones, su trabajo es sutil, como cuando cambia el tiempo verbal de los documentos de futuro a condicional, con lo que el calentamiento global no «ocasionará», sino «ocasionaría reducciones en los glaciares». Otras veces, su actuación es más directa, como donde tachó seis líneas y media de un párrafo y puso al margen: «Aquí hay una desviación de la investigación estratégica hacia hallazgos especulativos».
Las credenciales de Cooney ya indican que no se trata de la mejor persona para dirigir políticas medioambientales, ya que hasta 2001 fue jefe del Equipo de Cambio Climático en el Instituto Americano del Petróleo, un lobby de las empresas petroleras.
La Casa Blanca ha negado que esto sea censura, sino simplemente una revisión de los informes, habitual entre diversos organismos gubernamentales. Sin embargo, el ex director del Programa del Cambio Climático, Rick Piltz, que dimitió en marzo, ha declarado que «la politización llevada a cabo por la Casa Blanca amenaza la credibilidad y la integridad del programa».