Declaración de Robert B. Zoellick
Banco Mundial, 05/07/2007Washington, 25 de junio de 2007 - Agradezco enormemente el voto de confianza expresado unánimemente por el Directorio Ejecutivo al designarme como próximo Presidente del Banco Mundial. Es un honor especial y una responsabilidad, y estoy listo para comenzar a trabajar.
Las reuniones que he mantenido con los miembros del Directorio —tanto individuales como colectivas—, han sido muy beneficiosas, y valoro sus conocimientos, experiencia y apoyo. Espero con interés la oportunidad de trabajar con ellos, con los Gobernadores del Banco Mundial y con el personal altamente calificado y dedicado de la institución para reorientar nuestras energías hacia la labor de vital importancia que tenemos por delante.
Una vez que entre en funciones en el Banco Mundial, deseo conocer a las personas que llevan a cabo el programa para vencer a la pobreza en todas las regiones —y especialmente en África—, fomentar el desarrollo social y económico, invertir en el crecimiento y promover la esperanza, las oportunidades y la dignidad. Sé que el personal se dedica apasionadamente a esta misión, y respeto su imponente trayectoria, su esfuerzo constante por aprender y mejorar y su dedicación para obtener resultados.
Espero con interés la oportunidad de reunirme, tan pronto como asuma el cargo, con la administración superior y el personal del Grupo del Banco Mundial —integrado por la Asociación Internacional de Fomento (AIF), la Corporación Financiera Internacional (CFI) y el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (OMGI)—, y aprender todo lo que ellos puedan enseñarme. También deseo conocer a los dirigentes de la asociación del personal y recibir su asesoramiento.
Deseo comenzar a conocer las perspectivas y la experiencia de todos los integrantes del Grupo del Banco Mundial, incluyendo el personal que trabaja en terreno en la primera línea del desarrollo.
Durante el viaje que realicé recientemente a África, Europa y América Latina, diversas partes interesadas mencionaron repetidamente la elevada calidad e idoneidad del personal del Banco Mundial que colabora con ellas. Estoy orgulloso de estar en sus filas.
El Directorio del Banco, su personal y sus muchas partes interesadas saben que afrontamos grandes desafíos. Debemos encararlos con la humildad adquirida tras muchos años de trabajo. El mundo ha cambiado enormemente desde la creación del Banco, hace ya más de 60 años. Esta consumada institución de desarrollo, reconstrucción y financiamiento no sólo debe adaptarse: debe liderar los esfuerzos en pos de una globalización sostenible, fundada en el crecimiento con inclusión, las oportunidades y el respeto por la dignidad humana.