Un llamado a la acción a favor de África
Banco Mundial, 11/07/200610 de julio, 2006—Hace sólo un año que los líderes de las naciones más poderosas del mundo solicitaron duplicar la ayuda destinada a África antes del año 2010.
El memorable acuerdo se produjo en la cumbre de líderes mundiales del G8 en Gleneagles, Escocia, cita donde también se llegó a consenso respecto del alivio de la deuda en los países más pobres del mundo, además de los llamados a tomar medidas urgentes sobre el cambio climático y la eliminación de los subsidios comerciales.
Un año después, los líderes de los países más ricos del orbe se darán cita en la cumbre de este año en San Petersburgo, Rusia, cuyo programa incluye una evaluación preliminar de lo logrado hasta la fecha.
Tras su visita a Etiopía y Tanzanía, el Presidente del Banco Mundial, Paul Wolfowitz, viajará directamente para reunirse con los líderes mundiales en Rusia.
El Presidente del Banco señala que irá a la cumbre con un mensaje muy claro: “debemos cumplir con las promesas que hicimos el año pasado a este gran continente: ayudar a que los africanos más pobres tengan la oportunidad de salir de la pobreza y logren progreso constante que mejore la calidad de vida de las futuras generaciones“.
Al tiempo que advierte que se acaba el tiempo para finalizar con éxito la Ronda de Doha sobre conversaciones comerciales, Wolfowitz solicitó a los demás líderes que ejerzan presión para lograr un acuerdo de liberalización del comercio internacional.
“Puesto que el tiempo se acaba, los esfuerzos colectivos pueden marcar la diferencia”, comenta. “Podemos trabajar para sacar a millones de personas de la pobreza, aumentar el ingreso de los países en desarrollo, mejorar el acceso a los mercados mundiales y reducir los costos tributarios y de consumo, o dejar que todos los esfuerzos realizados hasta ahora se pierdan, situación que perjudicaría a todo el mundo”.
“Un resultado propicio para el desarrollo generaría ganancias tanto para ricos como para pobres. Sería un paso importante en el camino hacia la plena liberalización, la que con el tiempo podría llegar a generar una producción adicional de US$300.000 millones al año para la economía mundial. Sólo los países en desarrollo podrían ganar hasta US$86.000 millones, cifra que eclipsa el conjunto de esfuerzos en materia de asistencia bilateral anual”.
Por su parte, el Banco Mundial ha formulado un Plan de acción para África que aborda el llamado que se hizo en Gleneagles en torno a coordinar el aumento de la ayuda internacional destinada al continente. El Plan también busca fortalecer los motores del crecimiento a través del apoyo a un sector privado dinámico, la expansión de las exportaciones, las inversiones en infraestructura, el mejoramiento de la gobernabilidad del sector público, mayor producción agrícola y mayores inversiones en educación, salud y otros servicios básicos.
Durante su visita a Etiopía, Wolfowitz tendrá la oportunidad de ver en directo aquellos proyectos que persiguen mejorar la vida de las personas a través de mayor acceso a servicios básicos tales como salud, educación, agua y saneamiento, y escuchará sobre cuán importante es crear fuentes de trabajo.
Etiopía, con 74.777.981 habitantes, es el segundo país más poblado de África al sur del Sahara. Se trata de una de las civilizaciones vigentes más antiguas, y también una de las más pobres del mundo. El PIB per capita de Etiopía, de US$130, sólo representa alrededor de la quinta parte del PIB promedio de toda África al Sur del Sahara.
Este país es uno de los principales beneficiarios del programa de financiamiento en condiciones concesionarias del Banco Mundial, la Asociación Internacional de Fomento (AIF), con una cartera de 23 proyectos cuyo valor en junio de 2006 superaba los US$1.800 millones.
En Tanzanía, Wolfowitz conocerá los esfuerzos constantes del país destinados a fortalecer el crecimiento económico y fomentar la pequeña empresa. En la actualidad, la cartera comprende 23 proyectos activos con compromisos por US$1.600 millones en todos los principales sectores. Para conocer más detalles, consulte la sinopsis sobre el país i.
Tanzanía es una de las naciones más pobres del mundo. El ingreso per capita en 2005 fue de cerca de US$340. La esperanza de vida al nacer disminuyó de 50 años en 1990 a sólo 43 años en 2002, pero aumentó nuevamente a 51 años en 2005.
Después de la cumbre del G8, Wolfowitz viajará a Nigeria, Benin, Sierra Leona y Liberia en lo que se considera su segundo viaje a la región de África en calidad de Presidente del Banco, cargo que asumió hace poco más de un año.
Los múltiples países que visitará el Presidente del Banco destacan la extraordinaria diversidad de África. Aunque enfrentan desafíos de gran envergadura, todas estas naciones pueden apuntar a obtener grandes logros que les permitan recuperar la esperanza. La clave es construir sobre lo que ya se ha logrado, sea esto asegurar la paz, mantener mayor crecimiento o generar empleos.